Mi primer Maratón: semana 3

Ayer finalizó la 3° semana de entrenamiento de la maratón y aún no he hablado de mis objetivos (así, si no lo consigo, no hay testigos…jejeje).
Creo que las experiencias, en las buenas y en las malas, ganan si puedes compartirlas así que aquí van mis aspiraciones Berlín 2014:

1) Llegar a la salida
2) Cruzar la línea de meta tras 42,195 km
3) Tardar menos de 4h en conseguir el punto 2)
4) Conseguir un ritmo medio de 5’30» en el punto 2)

Es mi primer maratón, por lo que los puntos 1 y 2 son intrínsecos al reto. Los otros dos, tuve que decidirlos por imperativo de un compañero y maratoniano que al escucharme decir «yo sólo quiero llegar», me dijo:

Debes tener un tiempo objetivo para poder entrenar en consecuencia.

Pensándolo, tiene sentido ¿qué opináis vosotros?

Conseguir una media de 5’30» no lo veo claro. Aeróbicamente sé que tengo capacidad (el perfil de Berlín es muy llano) pero ¿y muscularmente? El asfalto es muy duro y mi cuerpo aún tiene mucho que aprender.
Si no llego al punto 4, me quedan 10″ por km de margen para conseguir el punto 3. Una media de 5’40» me haría parar el reloj en 3h 59m 06s (ahí, apurando😂)
Y si tampoco hay suerte en esto… ¡el punto 2 no puede fallarme!:)

Por tanto, dicho esto, inicialmente mis entrenamientos estarán basados en el RM objetivo de 5’30». Este dato es imprescindible para los entrenamientos de ritmo controlado.
Por ejemplo, el miércoles debía correr 10km a RM+10″ (es decir, a 5’40»), con sus 2km de calentamiento + 2km de descalentamiento.
Sigo en Galicia y para poder probar y no tener la excusa de la dificultad/irregularidades del terreno, nos desplazamos al paseo paralelo al mar que empieza en la playa de A Marosa. Asfalto y llano… Y tan llano. No fui capaz de correr a 5’40». Tras 4km a 5’17», intentando ir más despacio sin éxito😓, di por perdido el entreno y decidí dejarme llevar, disfrutar un poco del asfalto que tan poco me gusta jeje.
Al final acabé los 10k a 5’07», apretando los 2 últimos para, al menos, ver que no había ido de sobrada y me quedaban fuerzas para tirar.
Me deja con sabor agridulce: –Bien– porque he acabado con ganas y con fuerzas. –Mal– porque no he cumplido con el plan y todo puede pasar factura.
Nunca me había visto en una situación así. Es difícil rodar por debajo del ritmo que te pide el cuerpo, tener ganas y fuerzas y no poder disfrutarlo…(que esto no suele pasar, leches!😄)
¿Os ha pasado alguna vez? ¿qué hacéis en esos casos?

El martes y el viernes han sido entrenamientos paralelos a la semana 2: cuestas el martes y rodaje (progresivo a ser posible) el viernes.

El domingo tocaba tirada larga y… Peté. Por la mañana madrugón para volver a Madrid y a las 20h me lancé al calor seco de Madrid, 35° de nada a 700m de altitud… Igualito que Galicia, con sus 18 graditos a nivel del mar.
Los primeros 10min… Bueno, normalitos. Luego quería morir. Las piernas no me respondían, no podía moverlas a la velocidad que mi cerebro pedía. No sentía un calor excesivo pero tenía mucha sed (y llevaba agua) y sentía las piernas pesadísimas.
No me di la vuelta a la media hora porque soy muy cabezota😣 y porque no sé cómo encontré la excusa para no abandonar (y sí, excusa, que no motivación, de eso no encontré!); me dije «Venga Irene, que en la maratón te encontrarás en esta situación varias veces y tienes que acabarla!«.
Así que en vez de 1h 55min que tenía planificado, hice 1h 30m de puro #tractorismo. Primer entrenamiento fallido, pero mentalmente me exigí un poco más, me doy el aprobado 🙂

Ya en la 4° semana. Una semana más, una semana menos.

¡A correr!

Publicado desde Android por @irene_rb